El jugo de cannabis es tal vez una forma de consumir hierba que no conocías, y que tiene muchos beneficios para tu salud.
Además de proporcionar valiosos beneficios medicinales y aliviar el estrés cuando se ingiere o se fuma, la planta de la marihuana puede ser utilizada para uso industrial.
Sin embargo, pocos conocen o aprovechan sus hojas verdes, por ejemplo, haciendo zumo o jugo de cannabis.
Existen una serie de beneficios al extraer el jugo de cannabis que no querrás perderte, te dejamos cinco de ellos:
1- EL JUGO DE CANNABIS NO ES PSICOACTIVO
No a todo el mundo le agrada el efecto psicoactivo de fumar cannabis, pero incluso a los que no les gusta está de acuerdo en el hecho de que hay numerosos compuestos medicinales proporcionados por la planta.
Por esta razón, el jugo de hojas de cannabis podría ser considerado una excelente idea.
El jugo de cannabis en bruto proporciona clorofila, minerales que fortalecen los huesos, terpenos, cannabinoides como CBD y más, y sin un fuerte efecto psicoactivo.
Dado que se requiere calor para convertir el THCA (Ácido THC) del cannabis a THC, su forma psicoactiva, el jugo proporciona una forma de obtención de muchos de los beneficios de cannabis sin sus efectos psicoactivos.
Se considera al Dr. Wiliam L. Courtney como el padre del jugo de cannabis.
Es un galeno que, entre otras cosas, obtuvo el doctorado de medicina en la universidad estatal de Wayne, y que trabaja con numerosos dispensarios del estado de California, en el este de Estados Unidos.
Su extensa carrera médica es, a su vez, una extensa carrera como activista y férreo defensor de los múltiples benéficos que tiene la hierba.
El profesional cobró notoriedad cuando ayudó una de sus pacientes, Kristen Perkuski, quien sufría de lupus (una enfermedad que provoca que el propio sistema inmunitario ataque por error las células y otros tejidos sanos).
El especialista le indicó un tratamiento con jugo de cannabis y la mujer mejoró en forma veloz sus múltiples problemas, los cuales le impedían poder desarrollar una vida normal.
2- LOS PACIENTES PUEDEN CONSUMIR DOSIS MÁS ALTAS DE JUGO DE CANNABIS
Los que están luchando contra el cáncer o buscan alivio de las convulsiones y/o condiciones como el Parkinson son susceptibles de beneficiarse de la introducción de aceite de cannabis en su régimen.
Otro método de ingestión de los compuestos de la planta, extrayendo el jugo de las hojas y pudiendo ser tan -o incluso más- beneficioso para el paciente. o la persona que quiera prevenir una enfermedad.
De acuerdo con el Dr. William Courtney, fundador de la Fundación Internacional de Cannabis, “el THC se puede tomar en dosis de cientos de miligramos cuando está en su forma de ácido (jugo). Sin embargo, una vez calentado, la dosis tolerable caen a 10 mg al día”.
En resumen, se puede consumir más cuando es ingerido en forma de jugo de cannabis.
3- EL JUGO DE CANNABIS, PERO DE FLORES, TE HARÁ VOLAR
Si alguien desea tener estos efectos psicoactivos, pero no fuma o prefiere evitar el olor a hierba, puede consumir el jugo de la flor de la planta para experimentar un viaje psicoactivo.
Uno puede optar por hacer esto por tener problemas respiratorios (actualmente no hay efectos adversos para la salud asociados con fumar marihuana) o porque prefiere ingerir en un método menos dañino.
Como David Wolfe señala, el consumo de de jugo de cannabis de una flor puede colocarte, ya que tiene en su totalidad -en una forma ácida- los dos cannabinoides principales en la planta.
Estos son conocidos como ácido Tetrahidrocannabinol (THC-A) y ácido cannabidiólico (CBD-A) o “THC-ácido” y “CBD-ácido”.
“Cuando estos cannabinoides ácidos se calientan, se descarboxilan lo que significa que pierden su molécula de dióxido de carbono y se vuelven más activos”.
“Durante ese proceso, los cannabinoides cambian de la forma de ácido a la forma activada. Esto sucede automáticamente cuando los brotes de flor de la marihuana se fuman o son vaporizados”.
“Esto también ocurre cuando el cannabis se cocina en aceite de coco, aceite de oliva, o ghee incluso a fuego lento”, a decir de Wolfe.
El THC es el componente que puede dar lugar al usuario la sensación de subidón y que experimentan episodios de euforia.
El CBD no es psicoactivo y no va a conseguir colocar, además de ayudar a contrarrestar los efectos del THC, tales como paranoia.
4- ES MUY VERSÁTIL
El jugo de la hoja de cannabis puede disfrutarse aún mejor y gracias a que es muy versátil y fácil de combinar.
Se le puede añadir al jugo remolacha, zanahoria, manzana y jengibre o verter el cannabis en un jugo de naranja recién hecho.
Además, debido a que el jugo de las hojas de cannabis no consigue la sensación psicoactiva de pegue, se puede consumir en cualquier momento y hacer las tareas diarias.
5- HAY GRANDES BENEFICIOS PARA LA SALUD
La planta de cannabis está llena de cannabidiol (CBD), que es anti-inflamatorio, proporciona una protección antioxidante y ofrece propiedades neuroprotectoras.
Con todo esto, consumiendo jugo de cannabis se promueve la buena salud.
Incluso, el Instituto del Cáncer de Estados Unidos tiene vista a la marihuana como una potencial cura para el cáncer en su sitio web.
También hay numerosas anécdotas -o evidencia- de personas que se han curado a sí mismas o ayudado a sus hijos a curarse de enfermedades graves, mediante la utilización de componentes de la planta, principalmente el CBD.
Algunas de las condiciones que se han beneficiado por la ingestión del CBD incluye los trastornos de Alzheimer autoinmunes, disfunción celular, inflamación crónica, cáncer, Parkinson, y las convulsiones.
También es digno de mención que el fumar marihuana ha disminuido la dependencia de la población norteamericana sobre opioides y fármacos que mataban a cerca de 40.000 personas cada año.
Por el contrario, de la marihuana no hay constancia de víctimas fatales.
Y no las habrá a partir de ahora gracias a las diversas variables que usuarios y usuarias le han encontrado a la combustión mediante un porro o cigarro de marihuana.
El jugo de cannabis es una de esas variantes, una alternativa de consumo que puede subirnos o no, pero que, sin dudas, es más armónica con nuestro organismo.
¿Te animas a probarlo?