Papá y mamá fuman, y hace unos años te miraban fijamente a los ojos o te olían cuando llegabas a casa por si te habías fumado un porro
“Ay, cómo hemos cambiado” dice la canción, y así es. El consumo de cannabis o sus derivados como el hachís lleva con nosotros muchos años, por no decir miles o cientos de ellos.
Nacido en España entre 1960 y 1989
No hace muchos años, y los que han nacido en el ultimo tercio del siglo XX bien lo saben, el fumarse un porro de “estrangis” con los amigos te podía acarrear varios problemas a parte de que la policía de turno te pudiese pillar y dar un disgusto.
Ese momento duro y difícil de llegar a casa en esos años, y en el que te jugabas algo más que una bofetada parental (un buen par de hostias), hoy en día es algo del pasado, algo antiguo, pero los que pasaron por esos momentos seguramente aún lo tienen en la retina y, lo recordarán aunque no con nostalgia.
Sí, hubo una época que un santo y seña de una parte de la juventud española en el siglo pasado era fumar “chocolate” con los amigos. No sabíamos lo que nos fumábamos, pero nos reíamos mirándonos a nuestros ojos rojos y parecía que era nuestra forma de reivindicar y luchar contra un mundo de mayores anclado en el pasado.
Eran otros tiempos sin internet. Siempre nos habían dicho que la marihuana o hachís sería nuestra perdición, la droga del diablo, por que sería nuestro catalizador para adentrarnos en un sub mundo de drogas y donde siempre el ejemplo, era aquel drogadicto heroinómano sucio tirado por las calles y pidiendo limosnas para drogarse.
La información que se recibía en esos tiempos sobre el cannabis era sesgada, confusa, partidista y sin base científica, era con la que nuestras autoridades y gobernantes habían adoctrinado a nuestros padres y sociedades. Además, este adoctrinamiento también fue cultural y apoyado por un “cine hollywoodiense” anti-marihuana total. Este cine nos mostraba su actualidad y nos educaba en el camino para ellos correcto. Se creía que esa era la única verdad y nuestros padres queriéndonos proteger, así nos lo inculcaban.
Llegó a la era Internet y todo cambió
Luego llegó internet, el mundo cambió y todo el mundo podía acceder a la información, en un simple clic podrías saber lo que antes siempre era una opinión única y generalizada. Internet acercó la investigación y la ciencia a todos el mundo. Antes solo unos pocos eran los que podían informarse correctamente, si alguien se salía del guion o su opinión, fácilmente podía ser denostado. Con la red de redes, todo esto cambio y pasó a la historia esa forma de adoctrinar.
La percepción sobre el cannabis por parte de la sociedad también se vio alterada gracias a este medio de comunicación que enlaza a personas de todo el mundo. Lo que la investigación descubría, internet era su altavoz y cualquier persona desde cualquier parte tenía acceso a ella; ya no se dependía de una única doctrina gubernamental, todos pueden tener acceso a la información y tener su propia opinión con base.
También, esta interconexión trajo que la información, investigación, opinión o punto de vista con el cannabis de cualquier persona del mundo, podía llegar a todos en un momento. Ya no solo había una voz y opinión reinante. Cuando llegó la nueva “sociedad de la información” llegó y con ella muchos cambios que ahora todos hemos visto.
Cambio de visión por parte de toda la sociedad, papá y mamá fuman
Ahora fumarse un porro ya no sería caer en la drogadicción más absoluta y por lo tanto ser un “perdedor”, ahora puede ser la forma para paliar los terroríficos efectos de la medicina contra una grave enfermedad. Puede ser la forma de poderse relajar en el hogar o de tu ayuda con la resiliencia ante las adversidades. Puede ser la infusión que te ayude con el sueño o tu antídoto natural contra el dolor. La forma de desconectar de la presión diaria o simplemente, la refriega que te ayuda con tus molestias.
También, ahora consumir cannabis no solo es cosa de los más jóvenes, de hecho, el consumo en esas franjas de edad ya no es el mayor. Las personas adultas y que además ya conocían el consumo de cannabis, muchas de ellas la usan terapéuticamente para un mayor bienestar, otros como medicamentos suplente de los opioides y que tienen efectos demoledores.
Ahora en la actualidad, un joven puede ver a su padre relajarse en la terraza o jardín con hierba, a su madre fumarse un porro o vaporizar en vez de atiborrase a pastillas para dormir. O puede ver alguno de sus abuelos dándose una refriega con cremas para quitarse los dolores musculares u óseos, o a la hermana de su madre usando mascarillas de CBD para sentirse mas bella y joven.
La relación con el cannabis por parte de la actual sociedad de la información, está cambiando. Los impresionantes y generosos resultados de la investigación con una planta y su gran cantidad de usos (si hoy se descubriese en el Amazonas podría ser el descubrimiento botánico del siglo), también ha sido la gran propulsora de esta nueva visión con el cannabis, su uso y sus consumidores.
Por lo tanto…
En mi opinión se debería legislar todo lo referente a la planta y su consumo, el cannabis hoy en día es visto de otra forma y es aceptado por la sociedad. En la actualidad hay jóvenes consumidores, padres que les hace sentir bien después de una dura jornada, madres que se relajan y se desestresan, abuelas que lo untan en su piel, o abuelos que prefieren esa medicina natural a otros químicos para combatir el dolor.
Por lo tanto, tomen nota a quien corresponda, legalizar es una muy buena opción.