Introducción histórica
Los primeros testimonios sobre el consumo de la cannabis sativa se remontan a 10.000 años en china, al igual que la primera descripción de sus propiedades terapéuticas y psicotrópicas la encontramos en el milenario Pen-tsáo, libro al que durante muchos siglos farmacólogos y herboristas fueron añadiendo capítulos e información con lo que se convirtió en libro de referencia de la farmacopea de plantas medicinales en china, texto que se remonta al siglo 1 de nuestra era.
La cannabis sativa llamada Ma, que es un juego de palabras para aludir a lo caótico, mezclada con vino en un preparado llamado Mao-yao, se utilizaba fundamentalmente por sus propiedades analgésicas, aunque también se utilizo como narcótico sin llegar a ser generalizado.
En la India, el consumo de de la planta es endémico desde hace mas de mil años, recordemos que forma parte de su religión más importante, es la planta favorita de su dios Shiva (otro día contaremos la historia entera de cómo se conocieron).
En antiguos textos hindúes el bhang (nombre hindú del cannabis) aparece recogido como uno de los cinco reinos de hierbas que nos liberan de la ansiedad. El encanto de la ciencia (escrito entre los años 2000 y 1400 antes de Cristo).
Lo normal para los hindúes es ingerirlo en infusiones con leche grasa o en un helado llamado gulfi y en general, en la cultura hindú existe una rica variedad de comidas y bebidas que utilizan la planta con elaborados procesos.
En Israel la antigua receta para el aceite de la unción llamado “Bosm kaneh” (el que posiblemente utilizo Jesucristo en sus milagros y también los cristianos gnósticos en sus ritos),grabado en los libros del Antiguo Testamento del Éxodo (30,22-23) incluye más de nueve libras de marihuana en flor (una libra son 453 gramos) en una cierva de aceite de oliva (alrededor de 6,5 litros), junto con una variedad de hierbas y especias como la mirra, canela y casia. Los antiguos elegidos eran literalmente empapados en este aceite santo.
Farmacología por absorción oral
La ingestión oral del cannabis es un método menos fiable si lo que se pretende es una dosis estándar terapéutica. El THC es absorbido razonablemente bien por el intestino, pero el proceso es lento e impredecible y antes de llegar a la circulación general, la mayor parte es rápidamente degradada y metabolizada por el riñón.
Los niveles más altos de THC en sangre se encuentran entre una y cuatro horas después de la ingesta y el nivel global de liberación del THC al torrente sanguíneo es menor al 10% y varia ostensiblemente de una persona a otra. En consecuencia, el subidón aparece más tarde, además la cantidad de THC absorbida dependerá de si ha comido recientemente o no, así como la cantidad de grasas que haya en los alimentos.
Una complicación adicional en esta vía es que uno de los metabolitos que se forma en el riñón (11-OH-THC) es de carácter psicoactivo y de potencia similar al THC, lo que probablemente incida en el efecto global de una manera tan importante como el THC.
Esto nos plantea un problema a la hora de administrarlo de manera terapéutica, igual que ocurre con el fármaco sintético marinol (dronabinol disuelto en aceite de sésamo).
Hay muchas enfermedades crónicas o terminales en las cuales la vía inhalada no es la más indicada y si la vía oral, con lo cual no queda más remedio que automedicarse y probar teniendo unos parámetros más o menos estándar como explicáremos más adelante.
Cannaoliva (aceite de oliva de cannabis)
En este artículo comentaremos tres maneras diferentes de hacer cannaoliva, la primera manera la llamaremos FAT y es la que yo utilizo personalmente y tengo más perfeccionada ya que la cocino desde hace más de cuatro años (antes me automedicaba con mantequilla psicoactiva como vía oral). Personalmente como enfermo crónico de EII (enfermedades inflamatorias intestinales que engloban desde crohn, colitis ulcerosa, colon irritable, etc.) está más que demostrado en estudios clínicos que las zonas dañadas del tubo digestivo generan más receptores cannabinoides que las zonas sanas con objeto de regenerarlas más rápidamente.
La segunda que la llamaremos Dr.Diane la podéis ver en Youtube y viene de Norteamérica (es más potente que mi manera y en consecuencia más difícil de dosificar aunque si veis los videos de esta doctora que más parece Arguiñano, veréis como se lo da inyectado en fresas al difunto Jack Herer ya enfermo).
La tercera es la vía más orgánica aunque dudo que la mas aprovechable en rendimientos.
Sistema FAT
La cannaoliva es sencilla de elaborar, se tarda un poco en su elaboración pero se pueden cocinar en grandes lotes y conservar en frigorífico o congelador. El aceite de oliva hace que el organismo pueda absorber el 80% de los cannabinoides que se encentran en el follaje original.
Calienta 1,5 litros de agua en la olla exprés, añade 100 gramos de hoja de cogollo de buena calidad (si no añade más cantidad de hoja), 3/4 de litro de aceite de oliva virgen y remuévelo todo.
Pon el fuego más o menos fuerte hasta que suene la válvula de la olla y después bájalo al mínimo durante dos horas.
Cuela la mezcla con un chino de cocina recogiendo el líquido debajo en un recipiente. Presiona el follaje del fondo para que salga lo máximo posible. Vierte 0,5 litros de agua hirviendo sobre la hoja para sacar lo restante que es lo mejor y cuidado de no quemarse. Prensa las hojas restantes hasta que no puedas sacar líquido.
Deja que la mezcla repose y se enfríe. En una o dos horas la mezcla se separara, y seguidamente y una vez esté separada la podéis meter al congelador. Déjalo unas 12 horas en el congelador y sácalo, la cannaoliva se habrá congelado y podrás recogerla con una espátula de la parte superior del recipiente.
El aceite se licuara a temperatura ambiente y ojo que al licuarse se decantara el THC puro en el fondo (parece alquitrán), con lo que recomiendo agitar antes de usar. Se conserva un mes a temperatura ambiente .Guárdalo en el congelador para conservarlo durante más tiempo.
Compraros una pipeta de dosificación para tomarlo en crudo de 1 a 3 mililitros cada 8 horas si es necesario y salud con la cannaoliva.
Sistema Dr. Diane
El sistema de la Doctora Diane, como os mencione antes, se encuentra fácilmente en Youtube (eso si en Ingles Yanqui) y es prácticamente igual al mío pero con diferentes proporciones y tiempos de
cocción que os muestro (evidentemente es más potente).
115 gramos de hoja de cogollo de calidad.
1 litro de agua para la olla exprés.
0,4 litros de agua hirviendo para aclarado.
0,4 litros de aceite de oliva virgen.
20 minutos de fuego fuerte en la olla exprés.
60 minutos de fuego lento en la olla exprés.
Sistema orgánico (Comunidad Treating Yourself)
Necesitaremos una botella con tapa hermética (no utilizar botellas de plástico), aceite de oliva virgen orgánico, hojas de cogollo orgánico de calidad.
Llenar ¾ partes de la botella con hierba seca aplastada, después rellenar con aceite de oliva y cerrar la tapa. Dejar al sol del mediodía 3 horas todos los días y agitar enérgicamente (puede ser utilizado a las 36 horas), después de 2 semanas de la misma operación se puede filtrar y recoger.
Biodinámicamente remojar en signo fuego o aire más cercano a la luna nueva en marea baja. Tensión en el signo más fértil, agua y tierra, más cercano a la luna llena con marea alta.
Rendimiento esperado para hoja de cogollo de calidad será de 1 gramo de extracto por 25 gramos de hoja.
El cannabis de aceite curativo es relajante muscular, antiespasmódico, antiinflamatorio, antibacteriano y con cualidades calmantes.
Salud, Paz y Amor.
Om namah sivaia.